Rafael Michel.
Entre más leo, más descubro.
Las famosas tienen mucho guardado y sale a relucir todo, después de fallecidad. En el diario vasco, muchas cosas han salido a relucier, entre ellas que, hay más dudas sobre la muerte de Amy Winehouse. Una semana después de ser enterrada, comienzan a aparecer antiguos amigos de Amy Winehouse; entre ellos: Tony Azzopardi, un hombre de 56 años, que se hizo amigo de la cantante a través de su ex-marido, Blake Fielder-Civil.
Llamado Azzopardi, posee un amplio currícuum de drogas y aseguró que quiere ayudar a la policía a esclarecer las últimas horas de Amy, que conozcan toda la verdad, ya que le preocupa su seguridad.
Su versión es muy diferente de la defendida por el padre de Amy, en que aseguraba que su hija llevaba semanas limpia de drogas; según Azzopardi, un día antes de ser encontrada muerta, Amy se le acercó en un coche negro cerca de un pub llamado “The Eagle“, en la zona de Camdem.
La cantante le pidió ir a comprar drogas y juntos fueron en taxi a West Hampstead, donde el tipo hizo una llamada a un camello para que le trajera el pedido: crack y heroína, casi unos 1.400 euros, una compra a largo plazo.
Después fueron a la casa de la cantante, estuvieron un rato juntos y dijo que la cantante le dejó en Archway. Azzopardi comentó que tenía buen aspecto; sin embargo, la versión del amigo de Winehouse , choca con la postura defendida por la policía londinense, quien siempre ha mantenido que no había ninguna droga en el apartamento situado en Camdem Square.
Lafamilia también descarta la versión de Azzopardi y está convencida que la cantante falleció de un ataque al corazón o algún otro fallo de salud. La muerte de Amy ha disparado las ventas de sus dos únicos trabajos, colocando su segundo álbum, “Back to black“‘, en el número uno de los más vendidos de la semana pasada en Inglaterra.
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