miércoles, 20 de noviembre de 2013

CONTRASTA LA COLONIA NUEVA ESPERANZA CON FRACCIONAMIENTOS

Rafael Michel.
La miseria y la pobreza junto con la opulencia casi se mezclan entre la Colonia Nueva Esperanza y los nuevos fraccionamientos que están ubicados en la ampliación de la vía rápida, al Este de la ciudad más visitada del mundo: Tijuana. Desde la ruta se puede apreciar el contraste: Las casas de los fraccionamientos nuevos con las moradas de cartón o de madera y palos que están en lo que era, parte de los arenales del río Tijuana. A simple vista la colonia, fue una invasión, que con el tiempo los habitantes la quieren hacer como una colonia bien asentada, pero que en realidad es una tristeza observar las condiciones en que se encuentra. Tijuana tiene doble y hasta triple modus de vivir. En la comunidad media, media alta y hasta entre los riquillos se nota y se demuestra la realidad. Según la estadísticas, incluyendo a Tijuana, la cantidad de habitantes que viven en los cinturones de miseria de las grandes ciudades alcanzó ya la cifra de mil millones de personas, según información del tercer Foro Mundial Urbano, difundido aquí por Naciones Unidas México, quien destaca también que los vecindarios pobres con mayores carencias se encuentran en el Africa Subsahariana, el sureste asiático y América Latina. Maria Magdalena Cazares Limón y Magdalena Roman Jimenez, quien tienen su residencia oficial en Culiacán Sinaloa aseguran que “hay más pobreza en Tijuana que la mayor parte del país” sin emarbago ellas mismas se justifican “hay más gente aquí porque vienen a buscar una mejor vida. Vienen a buscar el pan” hace hincapié Román Jimenez. Ellas viajan del centro de la ciudad al Este de Tijuana y pasan por esos tristes pero reales paisajes panorámicos donde una pequeña calle de tierra separan “la miseria de la pobreza y la riqueza”.



"Y es que en Sinaloa hay mucha ganaderia, agricultura, pesca y mafia" comenta la señora Magdalena Jimenez Cazarez, quien siempre ha vivido "en la tierra del tomate" y sin remordimiento alguno, sentencia: "Por ello hay más pobreza y hasta miseria en Tijuana".
En las estadísticas, además se señala que en muchos aspectos, particularmente en las áreas de sanidad y salud, los pobres urbanos están en mayor riesgo que los de las áreas rurales, debido a la aglomeración, por lo que uno de los retos en las áreas urbanas es la densidad de la población. "Los gobiernos deben hacer mucho más para mejorar la situación en los cinturones de miseria, e incluso reducir su población" La conferencia internacional sobre el rápido crecimiento y expansión de las urbes alrededor del mundo se celebra este año en la ciudad canadiense de Vancouver y es organizada por el Programa de Naciones Unidas para los Asentamientos Humanos, en donde se reportó que 3 mil millones de personas, es decir, casi la mitad de los seres humanos, residen en centros urbanos, y ya hay 23 grandes ciudades, 18 de ellas pertenecientes al mundo en desarrollo, con más de 10 millones de habitantes. En 1900, una de cada 10 personas vivía en ciudades. Uno de los resultados de este rápido aumento de la población urbana es que millones de pobres de todo el mundo viven hacinados en barrios de tugurios y asentamientos ilegales, en unas condiciones de vida por debajo de los niveles mínimos necesarios para garantizar la salud de las familias y comunidades. Cada año el mundo se vuelve más urbano. La propensión de los habitantes a moverse hacia ciudades grandes hizo que la población en las urbes aumentara 86% para los países desarrollados y 67% para los subdesarrollados en los últimos doce meses. Dos especialistas de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) explicaron a Infobae América el panorama mundial y las proyecciones para los próximos 40 años. Rodrigo Martínez, asesor regional y experto de la División de Desarrollo Social, y Ricardo Jordán, oficial de Asuntos Económicos de la División de Desarrollo Sostenible y Asentamientos Humanos del organismo, son autores del documento Pobreza y precariedad urbana en América Latina y el Caribe. Situación actual y financiamiento de políticas y programas. Sus temas de especialidad se centran en la evaluación de programas y políticas sociales y en la gestión urbana entre otras cuestiones. "A mediados del año pasado el 50% del mundo pasó a ser urbano", explicó Jordán. Enfocados principalmente en América Latina y el Caribe, los números esperados son relativamente bajos, al rondar los 650 millones de ciudadanos en las grandes aglomeraciones urbanas. Si en el mundo los asentamientos precarios (favelas, villas miseria, barrios de emergencia) superan las 200 mil comunidades, la combinación de altos niveles de urbanización y de pobreza convierten a América Latina en una de las regiones con mayor proporción de personas que viven en asentamientos, donde al año 2001 sus 128 millones representaban 29,49% del total poblacional urbano. Según los especialistas, el país que más asentamientos tiene es Brasil, claramente por su tamaño. En segundo lugar se encuentra Perú, tercero Argentina y cuarto México. "Proyectado al 2020, Brasil se sigue llevando la mayoría", explicitó Martínez, pero Jordán aclaró: "Hay una cosa que nos hace ser optimistas: si volvemos al escenario mundial, la población en tugurios declinó pasando de 2000 a 2010 del 39 a un 32 por ciento", que deja a nivel macro una disminución en líneas generales, pese al aumento en América Latina. Empero, resaltó: "Si bien es cierto que proporcionalmente va decreciendo, lo que aumentó es la inequidad, la distancia entre tugurios y urbanización. América Latina ha aumentado ese coeficiente, nos hemos hecho más desiguales. Eso representa y culturiza las políticas (de Naciones Unidas): cerrar las brechas de la distribución de los recursos respecto de esas políticas públicas", detalló Jordán. La misión para la Cepal es "hacernos menos distintos". Esto implica hacer que deje de generarse esa distancia abismal entre clases que antes solo distinguía entre "campo y ciudad", pero ahora subdivide consistentemente la urbe entre construcciones medianamente estables y precariedad. Lo que ocurre en muchos lugares es que los recursos existen, pero la ejecución de las políticas forma parte de la misma gobernabilidad del Estado. "Hay un tema de financiamiento para las políticas de hábitats", explicó Martínez y prosiguió: "La mayor dificultad es cómo llega esa política, ya sea construcción de viviendas por parte de los gobiernos o apoyo para acceder al financiamiento, y eso depende de la financiación, inversión y de la política pública de cada Estado". Se focaliza en cómo se entregan esos recursos. "Hay financiamiento público, generalmente", comentan los expertos. Independientemente de que haya donaciones o créditos, "las experiencias en las regiones son distintas: hay desde países más interventores a más subsidiarios" que optan por políticas de desarrollo públicas o recurren a las inversiones privadas. En la mayoría de los casos "depende del sistema de gobierno", puntualizaron El libro que hoy menciono no es un libro de viajes al uso, pero si es un libro que habla del mundo en el que vivimos.
A los que opten por su lectura se encontraran con un viaje a la verdadera realidad de una parte de la población mundial . Esas realidades que miramos de vez en cuando y simplemente cuando las noticias saltan a los titulares de nuestros corruptos y tele-dirigidos medios de comunicación. Un libro denuncia que nos presenta de forma rigurosa y amena un estudio-análisis social, antropológico y económico. Se trata de un retrato del mundo real, ese que mucha gente ignora entre sus comodidades occidentales y entre el zapping para ver el fútbol y los reality shows. Pero son estos libros fundamentales los que nos llevan a entender y a reflexionar sobre un modelo de sociedad que condena y asola a miles de millones de seres humanos a lo largo y ancho del Planeta Tierra. El libro analiza diversos temas, entre ellos destaco : Pobreza ( rural y urbana). Migraciones. Enfermedades ( El azote del SIDA en el Tercer mundo). Contrastes Norte-Sur. Conflictos armados. Salud. Infancia. Geopolítica internacional. Intereses de grandes multinacionales. Esclavitud. Agua. El problema alimentario. Megaciudades Obviamente se trata de un libro políticamente incorrecto, y que su lectura permite analizar y descubrir diversos problemas actuales y del mañana. Sobre todo es un libro que analiza con rigor lo que todos sabemos: el infame y desastroso reparto de la riqueza y las enormes desigualdades sociales que hay en nuestro mundo. El libro permite contrastar lo que muchos hemos visto sobre el terreno en nuestros viajes: Las grandes megaciudades de los países en desarrollo. Las enormes desigualdades sociales. La miseria. La contaminación extrema. El problema de la infravivienda. Las carencias de servicios básicos para una parte muy grande de la población mundial. El azote de las enfermedades. La falta de alimentos. Y la desesperación con la que muchos millones de seres humanos viven todos los días. Y de forma magistral el libro de Mike Davis analiza la realidad y la evolución que muchas grandes ciudades del mundo van a experimentar en pleno siglo XXI. Ciudades de Asia, América latina y África principalmente en lugares como Manila, Sao Paulo, Delhi, Bombay, Lagos, Dacca. Grandes ciudades con mas de diez millones de habitantes que sufren problemas sociales de primera magnitud, migraciones del campo a la ciudad que provocan en pleno siglo XXI graves problemas de todo tipo. Por otro lado se analiza como parte de estas ciudades hiperdegradadas van a ser la semilla de muchos conflictos que asolen el siglo XXI. La pobreza extrema, la falta de oportunidades y la desesperación serán la semilla detonante de muchas guerras. Un libro recomendable para leer aquellas cosas que desgraciadamente ya nunca aparecen en los telediarios...