La oración, con Fe.
Urge el llamdado de nuestro Dios Todopoderoso.
Para todo.
No importa la religión que profeses.
No importa la religión que profeses.
Pero debemos de Orar. Dialogar con Dios.
Pero...
Conforme a la Iglesia católica, la oración es un diálogo entre Dios y los hombres. El hombre ha sido creado para glorificar a Dios, a través de la oración se le da gloria, de lo cual el ser humano se beneficia espiritualmente, recibiendo el Amor del Padre por la comunión con Jesucristo a través del Espíritu Santo.
Pero...
Conforme a la Iglesia católica, la oración es un diálogo entre Dios y los hombres. El hombre ha sido creado para glorificar a Dios, a través de la oración se le da gloria, de lo cual el ser humano se beneficia espiritualmente, recibiendo el Amor del Padre por la comunión con Jesucristo a través del Espíritu Santo.
Entre nuestras peticiones no debemos de
olvidar, aparte de las necesidades
propias –personales- que frene tanto desman. Tanto crimen. Tanto desorden y que
guíe a nuestra juventud por el buen camino.
La oración es un encuentro con un Dios santo.
Es entrar a su presencia, es entrar a una
comunión y una relación con él.
Es el medio por el cual lo venimos a conocer.
De este conocimiento íntimo y personal de Dios brota la victoria del Señor
Jesús a través de nosotros y hacia el mundo que nos rodea.
La oración
es elevar un ardiente clamor a
Dios por alguna cosa específica, juntamente con la cual vendrán muchos otros
dones y gracias. Como portadores de ellos llegaran a nuestra vida la Fortaleza, Paz y Quietud.
Orar
verdaderamente es la Fuente de toda renovación, restauración, y santificacion
del corazon humano.
Pidamos, pues por nosotros mismos.
Por
nuestra familia.
Por nuestros amigos.
Por nuestros compañeros de trabajo.
Por los profesionistas.
Por los políticos. Por los policías.
Por nuestros desconocidos, por nuestros
compatriotas, por nuestros vecinos; por los visitantes a la ciudad o al país. Y
hasta por nuestros por nuestros
enemigos.
Sí, por todos nuestros semejantes y por el
mundo entero.
Amén.
No hay comentarios:
Publicar un comentario