Sí, desde Tijuana, Baja California hasta la peninsula de Yucatán, Quintana Roo; los mexicanos tenemos que ir con él. Vámos con él!, No hay de otra o nos hundimos pero debemos ayudarle a salir adelante. El sistema electoral mexicano ha formalizado el veredicto dado por la ciudadanía en las urnas en julio pasado: desde el 1 de diciembre de 2012 la Presidencia de la República recaerá en Enrique Peña Nieto, quien en una elección ejemplar obtuvo la mayoría de sufragios y ostenta la confianza ciudadana para dirigir a la nación durante los próximos seis años. Los habitantes de la peninsula de Baja California, somos parte de la Patria Mexicana, por ello, estamos seguros que pondremos de nuestra parte, para salir adelante conforme a la Cultura de la legalidad y el estado de derecho. Nada de tolerar los antivalores. La delincuencia.
"La legalidad es fundamental para nuestra democracia". El máximo órgano jurisdiccional en materia electoral, con fundamento en los artículos 99 de la Constitución, 58 de la Ley General de Medios de Impugnación y 186 de la Ley Orgánica del Poder Judicial de la Federación, ha formulado la declaración de validez de la elección y la de Presidente Electo de Enrique Peña Nieto.
Una vez entregada la constancia respectiva, toca el turno a Jesús Murillo Karam, presidente de la Cámara de Diputados, dar cumplimiento a lo ordenado en el artículo 74 fracción I de nuestra Constitución y al 186 de la Ley Orgánica del Poder Judicial, a efecto de que se expida y publique de inmediato el Bando Solemne para informar al pueblo de México que Enrique Peña Nieto es el Presidente Electo de los Estados Unidos Mexicanos, y que a partir del primer instante del 1 de diciembre próximo será el Jefe de las instituciones del Estado mexicano. Se trata de un hecho que no es resultado de generación espontánea, sino de un arduo proceso social que fue creando las circunstancias para que la ciudadanía mexicana optara por un hombre como el exgobernador del Estado de México, quien a lo largo de su carrera en el servicio público ha enfrentado múltiples retos que ha sabido sortear con eficacia y sensibilidad.
Desde el 15 de septiembre de 2005, fecha en que dio inicio su gestión al frente de la entidad más poblada del país, no pocos fueron quienes consideraron a Enrique Peña Nieto como uno de los políticos con mayores posibilidades para contender por la Presidencia de la República en 2012, sin embargo, esos rumores no permearon en el Palacio de Gobierno de Toluca, pues la responsabilidad de hacer frente a los problemas que representa un conglomerado de 15 millones de personas no deja espacio para futurismos.
De haberse dejado llevar por la ola de rumores quizá hoy el resultado sería distinto, pero como político profesional Enrique Peña Nieto sabía que antes que todo tenía que entregar buenas cuentas a los mexiquenses.
Una vez que hizo entrega de un mejor Estado de México respecto al que recibió en 2005, Enrique Peña Nieto decidió participar en la contienda interna del PRI para determinar al candidato que competiría por la Presidencia de la República el 1 de julio de 2012.
Conforme pasaron las semanas los diversos sectores que integran el PRI consensuaron que el ex gobernador del Estado de México era el mejor posicionado para representarlos en la lucha por la Presidencia de la República.
Desde el 30 de marzo y hasta el 27 de junio ni una sola calumnia, ofensa o ataque se le escuchó decir a Enrique Peña Nieto, quien llevó a cabo una campaña de ideas y propuestas, haciendo uso de mecanismos innovadores para llegar a todos los rincones del país y echando mano de un amplio ejército de jóvenes, quienes con entusiasmo y entrega recorrieron las calles para expresar su convicción de que Enrique Peña Nieto era la mejor opción para sacar a México del actual estancamiento económico y clima de inseguridad en que se encuentra.
Se trata de propuestas claras que fueron expuestas a lo largo de 90 días por parte de Enrique Peña Nieto y de su equipo de trabajo comandado por Pedro Joaquín Coldwell, Luis Videgaray Caso y Miguel Ángel Osorio Chong.
El domingo 1 de julio de 2012, tras un proceso electoral bien organizado y bien ejecutado por el IFE, más de 50 millones de ciudadanos acudimos a las urnas en un ambiente de paz y tranquilidad. Ni un altercado tuvo lugar aquel domingo, lo cual fue reconocido nacional e internacionalmente como un gran avance en la historia democrática del país.
Tras su triunfo del 1 de julio, Enrique Peña Nieto optó por la prudencia, mesura y paciencia en aras de contribuir a un clima de concordia y armonía entre los mexicanos, pues la división generada en las campañas no es un medio para generar mayor bienestar y desarrollo, sino un obstáculo que perjudica a quienes más necesitan apoyo. De ahí que la LXII Legislatura del Congreso federal esté llamada a ser el trienio legislativo que saque adelante los ordenamientos legales que el Ejecutivo y sectores productivos requieren, para hacer de éste un país más competitivo y mejor equipado para hacer frente a los vaivenes económicos.
México no tiene tiempo que perder y por ello, el Presidente Electo Enrique Peña Nieto ha llamado a la unidad y la concordia como un elemento imprescindible para transitar a la etapa de progreso que 112 millones de mexicanos exigimos. ¡Vamos con él!
Los habitantes de la peninsula de Baja California, somos parte de la Patria Mexicana, por ello, estamos seguros que pondremos de nuestra parte, para salir adelante conforme a la Cultura de la legalidad y el estado de derecho. Nada de tolerar los antivalores. La delincuencia.
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