FELICIDADES HOY Y SIEMPRE
TÍA EVA.
Cada cumpleaños significa un nuevo año cumplido, lleno de
experiencias, de crecimientos y de aprendizajes muy importantes para nuestra
vida, pero cumplir 77 años ¡es mucho mejor!
Mi tía Evangelina Michel los acaba de cumplir. Llenas de gozo, sabiduría, aprendizajes y lecciones que le ha dejado la vida.
En este mes de septiembre –mes de los personajes históricos mexicanos- también cumplen años César, Ana, Raúl y Aurelio. A todos nuestra felicitación. Ya saben se les quiere y se les extraña.
Vivimos unos tiempos en los que se venera sin concesiones la juventud; solo parecen ser aceptados los cuerpos adolescentes sin muestras aparentes del paso del tiempo y la sociedad ha dejado de valorar la experiencia y los conocimientos de los mayores. Pues bien, yo también reivindico mi edad, me gusta hacerme mayor y celebrar mi cumpleaños porque cada día que pasa me siento mejor conmigo mismo y, además, estoy más chipocludo. El ser gemelo me hace más interesante en la humanidad; gracias a la vida que nos escogió esta familia, llena de altibajos, pero con mas alegrías que nada. Gracias a mi madre Graciela Michel, que tambien estaría gozosa, que no lo dudo que desde el cielo también celebra su hermana la jovencita de mi tía Eva.
Puede parecer que no tengo abuela, pero se hace necesario decir basta a este afán por querer seguir siendo jóvenes para siempre; a tener que negar nuestra edad, sobre todo las mujeres, a no poder decir sin tapujos los años que no solo han cumplido, sino que han vivido, disfrutado, compartido, amado, llorado y, por supuesto, crecido. Gracias tia Eva por lo mucho o poco ue nos ha regalado en estos sus 77 septiembre de vida.
Cumplió los 77 años y es orgullo, por eso tenemos que
celebrarlo y decirle al mundo que celebramos su aniversario, desde donde quiera
que estemos cada quien. No pudimos asistir ala gran fiesta -no por la pandemia covid -19que nos aqueja todo el mundo- sino por nuestros compromisos laborales y de familia; pero estamos en espíritu y corazón con ustedes.
Hay mucho que decir, pero solo quiero mencionar, en síntesis: Que siga gozando de buena salud, de su familia. Gracias por ser la tía que es. Gracias por tener esos prim@s buenos y nobles, -aunque cada uno tenemos nuestro carácter-, que nos hacen únicos a cada quien.
Mil felicidades y que nos dure muchos años más.
Todos la felicitamos
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